Desde hace algún tiempo, veníamos trabajando con el anterior Govern de la Generalitat para que La Llagosta tenga los equipamientos de salud que nos merecemos.
Sabéis que los ayuntamientos no construimos ambulatorios, ni gestionamos los servicios médicos. Sabéis que eso corresponde a la Generalitat.
Habíamos conseguido que un nuevo ambulatorio para La Llagosta se incorporara en la planificación del Govern Territorial de Salut del Baix Vallès. Hay documentos que lo acreditan.
Incluso, ante las dificultades económicas, habiamos planteado la posibilidad de realizar nosotros el proyecto y de avanzar el dinero para la inversión a cambio de que la Generalitat nos lo abonara después. El anterior Govern había aceptado la propuesta e incluso nos había hecho llegar un borrador de convenio. También hay documentos que lo acreditan
Lamentablemente, hay un documento reciente que acredita un tema mucho más preocupante.
Hemos recibido hace unas semanas una carta de la Generalitat, de este nuevo gobierno de los ‘mejores’ (recortadores), diciendo que no demos un paso más en el tema del ambulatorio hasta recibir nuevas indicaciones después de las elecciones municipales.
Espero que no signifique lo peor: que el semáforo se pone rojo.
Espero que no pretendan dejarnos sin un nuevo ambulatorio.
Pero me da la impresión que se esperan a darnos la noticia después de las elecciones para que los de CiU en La Llagosta no sean castigados por esto.
No voy a bajar los brazos. No voy a parar en mi empeño hasta conseguir un nuevo ambulatorio, más moderno, con más profesionales y con los servicios que requiere La Llagosta, tal y cómo estaba pactado con el anterior Govern de la Generalitat.
Si me tienen que llamar pesado, me lo llamarán. Si tenemos que movilizarnos, lo haremos.
Tenéis mi compromiso.
